Esta intensificación de actividad obedece a la entrada paulatina de nuevo material magmático, desde un reservorio ubicado varios kilómetros bajo la cumbre, que luego ha sido emitido a través del cráter desde el día 28 de febrero. Los fenómenos superficiales asociados a este proceso son emisiones casi permanentes de gases, ceniza y materiales lávicos incandescentes. Durante las noches, estos fenómenos se observan en forma de actividad estromboliana continua, es decir, expulsión de bloques incandescentes desde la zona del cráter, que descienden por los flancos del volcán, hasta 500 metros bajo el nivel del cráter. Además, se han recibido reportes de leves caídas de ceniza fina en los sectores de El Manzano, Choglontus y Pillate, y, desde zonas cercanas al volcán, reportes de ruidos y bramidos de intensidad leve a moderada.
Las fotografías de este reportaje están en el marco del proyecto DIRIGEH-Chimborazo y han sido realizadas durante la grabación del documento audiovisual de sistematización del mismo proyecto por nuestro jefe de proyecto en Ecuador, Daniel Boyano Sotillo y Edwin Javier Obregón.



Las fotografías de este reportaje están en el marco del proyecto DIRIGEH-Chimborazo y han sido realizadas durante la grabación del documento audiovisual de sistematización del mismo proyecto por nuestro jefe de proyecto en Ecuador, Daniel Boyano Sotillo y Edwin Javier Obregón.


